Las victorias sufridas saben mejor. Es una frase hecha que no deja de ser real visto lo visto en la Catedral. El triunfo de Helvetia Anaitasuna 27-25 ante el Atlético Valladolid con una remontada épica ha proporcionado un subidón de moral al equipo y a la grada.
La afición ha sido parte vital de este triunfo, con un apoyo muy importante en los últimos minutos, cuando la victoria se escapaba con una diferencia de 5 goles para los visitantes. Sin embargo, la presión del público y la fe del equipo han permitido conseguir los dos puntos.
El equipo consigue así un reto importante: dos triunfos de dos primeras jornadas. Cuatro puntos para empezar. Ir llenando el granero para tomar confianza y evitar la ansiedad. El siguiente encuentro, este sábado en Cangas ante un rival temible como local.