Cinco de cinco. Seguramente, el equipo tiene cuestiones que mejorar, pero las dinámicas positivas hay que cogerlas cuando vienen. Los finales emocionantes, las remontadas… Son la tónica habitual de este Helvetia Anaitasuna, pero también el buen rendimiento defensivo en las segundas partes, los grandes números de los porteros (hoy era el día de Sergei), la confianza del grupo, la fe en la victoria. El caso es que los navarros llegan a la participación europea con diez puntos y un pleno de victorias en liga.
La primera parte ha vuelto a ser mejorable. El Huesca ha salido mejor a la pista, tanto en labores atacantes como defensivas. Las diferencias se han abierto pronto en el electrónico y han llegado a ser de cinco goles para los aragoneses. Al descanso, los de Juanto Apezetxea han conseguido cerrar algo el hueco y han conseguido dejarlo en cuatro goles para afrontar la segunda mitad.
Tal y como sucediera en partidos anteriores, el cambio en la portería ha coincidido con una importante mejora defensiva y eso ha permitido que el marcador se haya apretado en apenas diez minutos. Posteriormente, el partido se ha mantenido con pequeñas diferencias hasta llegar a otro final de infarto. La remontada se ha consumado en los instantes finales y Helvetia Anaitasuna ya no ha perdido la delantera en el partido.
Ya es el momento de pensar en los siguientes objetivos. El próximo choque llega este domingo a las 18.00 horas contra el Talent Plzen checo en la segunda ronda de la Copa EHF. La Catedral vivirá una nueva fiesta, con la participación de los clubes convenidos y una comida popular que ya ronda los 400 comensales. Los #3000verdes vuelven a tener otra cita para disfrutar del balonmano.