La gran noticia del partido en el Palau fue el debut de un joven pivote navarro, Antonio Bazán. Tiene 17 años, de Zizur, ha llegado del Ardoi, es internacional en las categorías inferiores y ya sabe lo que es jugar con Helvetia Anaitasuna. Su primer partido fue contra un equipazo, el Barcelona, y la experiencia fue impresionante para él. (Imagen del Diario SPORT)

Tras regresar del viaje, el chaval estaba todavía en una nube. Así nos lo contaba. «Emocionado después del partido de ayer, de jugar contra los mejores del mundo, fue todo un lujo. No lo voy a olvidar nunca porque debutar y hacerlo en el Palau es impresionante».

Sin embargo, el día a día de un jugador de Asobal no cambia demasiado. «Mi vida no ha cambiado mucho. He ido al instituto y sí que ha tenido muchas felcitaciones, pero lo importante ahora son los estudios y el balonmano es algo complementario».

Pocas horas después, Antonio recuerda cómo fueron sus primeros minutos en Asobal. «Salí en el minuto 15 y cuando me llamó Aitor estaba nervioso, pero tenía muchas ganas de salir y de jugar. En la primera parte ataqué y defendí, en la segunda sólo ataqué y al final ataqué y defendí hasta que me cambió».

El poderoso Barcelona fue su primer rival en Asobal. «Fue una motivación más, fue impresionante. Verte que te atacan los mejores jugadores del mundo es una pasada. Tienes que exigirte mucho a ti mismo, es muy diferente, evidentemente, que jugar en Primera Nacional».

Ha pasado en pocas semanas de comprarse las camisetas de los grandes a enfrentarse a ellos. «Mis ídolos son todos porque son excepcionales jugadores. Es verdad que Karabatic es impresionante, también Nodesbo, que es un gran pivote, tiene mucha calidad, igual que Sorhaindo. Al final, intentas inspirarte un poco en ellos, pero es difícil». Tuvo la oportunidad de estar cara a cara con los más grandes. «Sí, cayó Karabatic por mi zona en la primera parte, en la segunda Gurdindo y Lazarov. Es increible».

El debut en Asobal no ha sido una sorpresa para muchos. «Sí, se podía ver llegar, no lo sé. La lesión de Alex Garza me ha permitido debutar y ha sido una pasada y un lujo». Antonio disfruta de cada paso en su carrera. «Una experiencia que da mucha ilusión. Ir convocado ya es una grandísima noticia, es algo indescriptible».

Este momento de felicidad no supone más que un punto y seguido en su carrera. «Tengo que ir aprendiendo poco, con los pies en el suelo. Tengo que seguir trabajando, aprendiendo, con paciencia, a ver si las cosas van saliendo bien». Se trata de un pivote y ha encontrado en Etxaburu, pivote internacional, un maestro. «Aitor sabe mucho de la posición de pivote y en los entrenamientos te explica cómo girarnte, cómo defender… Da muy buenos consejos para un jugador joven como yo».